El siguiente es el tercer texto que publicamos sobre el tema de la Audiencia Pública Ambiental llevada a cabo —por petición y presión de la comunidad— el pasado jueves 9 de febrero/17, en el municipio de Restrepo, Meta ante la Agencia Nacional de Licencias Ambientales (ANLA) sobre el tema 'proyecto vial Villavicencio-Yopal, tramo 1: doble calzada Villavicencio-Cumaral. Audiencia en la cual, sin excepción, la comunidad y las autoridades locales manifestaron su rechazo unánime a la destrucción del piedemonte llanero que pretenden hacer con este proyecto la ANI y su contratista Covioriente, con pretendidos avales y licencias de Cormacarena y la ANLA.
PONENCIA AUDIENCIA PÚBLICA CONVOCADA POR LA ANLA
Presentada por NÉSTOR
RESTREPO ROLDÁN
Representante Legal de
la VEEDURÍA DOBLE CALZADA VILLAVICENCIO – EL YOPAL
Restrepo (Meta), febrero
9 de 2017.
Quiero aprovechar esta oportunidad
que como ciudadano colombiano me corresponde para recordar un poco la historia
de la vía que hoy nos ocupa, hacer algunos comentarios al respecto de la obra
que se proyecta y para que como representante legal de la Veeduría Doble
Calzada Villavicencio – El Yopal, dejar registrada una constancia.
El 11 de agosto de 1916, los
senadores de Boyacá y Santander, Arturo Ojeda N., Pablo E. Cárdenas y Alejandro
Galvis, presentan el proyecto de ley por el cual se fomenta la colonización de
los Llanos; a través de esta ley, el Congreso decretaba en su artículo 1° “El
gobierno procederá a fomentar la colonización, la agricultura, la ganadería y
el comercio en los Llanos Orientales de la República, a cuyo efecto promoverá
la navegación de sus ríos, abrirá caminos hacia su interior, procurará que los
productos de las salinas se aprovechen ventajosamente, garantizará la seguridad
por medio de una justiciera parcelación y adjudicación definitiva y expedita de
las tierras; en una palabra, hará todo cuanto sea posible para organizar la
vida social en los territorios de San Martín, Casanare, Vichada, Vaupés, Arauca
y demás de los Llanos Orientales”. (Ley 70 de 1916).
En el año 1962, Fernando Belaunde
Terry, presidente de Perú, planteó el proyecto de construcción de la Carretera
Marginal de la Selva, que una vez concluida se extendería desde Arauca, en la
frontera de Colombia y Venezuela, hasta el terminal ferroviario de Santa Cruz
en Bolivia, uniendo las tres grandes cuencas fluviales de América del Sur
(Orinoco, Amazonas y de la Plata), conectando en su extenso recorrido a
Venezuela, Colombia, Ecuador, Perú, Bolivia y Argentina. Como pueden notarlo,
la Carretera Marginal de la Selva o Troncal del Llano o Troncal de Piedemonte,
es un importante proyecto vial en Sudamérica.
El 3 de junio de 1998, el periódico
El Tiempo publica: “Una comitiva de altos funcionarios, encabezados por el
presidente Samper inaugurará hoy la Marginal de la Selva, una vía soñada desde
hace 30 años para integrar la frontera colombo-ecuatoriana con la
colombo-venezolana atravesando todo el piedemonte llanero. Esta vía tiene más
de 1.500 kilómetros y está dividida en dos tramos: el primero va de
Villavicencio a Arauca y el segundo, de Villavicencio al Puente Internacional
San Miguel en la frontera con Ecuador.
“Según el INVÍAS, lo que
oficialmente inaugurará hoy el presidente Samper, serán apenas los 280
kilómetros comprendidos entre Villavicencio y El Yopal, trayecto completamente
listo, es decir señalizado, pavimentado y en excelentes condiciones de
transitabilidad. La fase que ahora se desarrollará y que vale $ 102.000
millones de pesos, contempla obras, así como estudios y diseños para hacer 305
kilómetros del tramo San Vicente del Caguán – La Macarena – Puerto Arturo y San
José del Guaviare. El consorcio Metro Vías, debe entregar los estudios antes de
que termine este mes.
“El proyecto completo de la
Troncal del Piedemonte (que fue incluido en el Plan Maestro de Transporte
Intermodal al 2035) contempla un recorrido que sale desde el puente
internacional San Miguel en el Putumayo, límite con Ecuador, pasa por Santa Ana
Y Villa Garzón (Putumayo), conecta con san José de la Fragua, Florencia, Puerto
Rico y San Vicente del Caguán (Caquetá), para llegar a San José del Guaviare
(Guaviare), empalmar con la vía a Villavicencio (Meta) y seguir hacia El Yopal
(Casanare) para arribar a Arauca (Arauca), en el paso hacia Venezuela.”
Como puede apreciarse, a los 100
años de la ley y a los 54 años de la idea del peruano Belaunde, el gobierno
nacional reconoce la importancia de esta vía e incluye parte de ella en el
programa llamado Vías 4G para la competitividad. Con el Llano, todo ha sido
así, una región cifrada en el olvido por parte de los mandatarios nacionales y
la dirigencia regional.
De no haber sido porque el 9 de
septiembre de 1991, la virgen de Chirajara con un fuerte aguacero destruye el
puente que lleva su nombre en la carretera que nos une con Bogotá, y por 33
días el Llano queda incomunicado con el resto de Colombia, el presidente
Gaviria no habría ordenado la construcción de la llamada Autopista a los Llanos,
que en 1994 inició sus obras; aún no han sido culminadas y lo que es peor,
todavía falta el Tramo I (Cáqueza – Bogotá), pues no cuenta con diseños de
obra.
En el mes de julio de 2015, dentro
del proyecto Asociación Pública Privada (APP), llamado por nosotros A Punta de
Peajes, nace Covioriente, empresa a la que la Agencia Nacional de
Infraestructura – ANI, le adjudica este ambicioso proyecto, y el 30 de octubre
del mismo año, los ciudadanos somos convocados al asadero La Ye, acá en Restrepo,
para la socialización del contrato 010 de 2015.
El 30 de noviembre constituimos la
Veeduría y el 16 de diciembre la Personería de Villavicencio, con el registro
151 de 2015, emite la resolución N° 407, otorgando el registro público a la
misma.
El 13 de mayo de 2016, en el salón
El Balmoral, ubicado acá en Restrepo, abrimos un Conversatorio en compañía de
la Contraloría General de la República, al cual asistieron funcionarios de la
ANI, los directivos de la concesionaria, la interventoría, delegados de
Cormacarena y Corporinoquia, el alcalde de Restrepo, los delegados de los
alcaldes de Paratebueno y Tauramena, y no asistieron los gobernadores de
Casanare y Meta, ni los alcaldes de Villavicencio, Cumaral, Medina, Barranca de
Upía, Villanueva, Monterrey, Aguazul y El Yopal que habían sido convocados.
En su apertura mencioné varios
planteamientos, de los cuales resalto los siguientes:
Cuando nos menciona el gobierno
nacional, que en el país se están construyendo vías 4G, automáticamente nos
transportamos mentalmente a la información que recibimos a través de películas
o por televisión, a esas grandes y lujosas avenidas existentes en otros
continentes y que se trazan para mejorar
la competitividad del país disminuyendo el costo y tiempo de transporte de
personas y en especial de carga, desde el punto de producción hasta los puntos
de exportación.
En la nuestra, incluida en el
Proyecto 3 y denominada CORREDOR BOGOTÁ - VILLAVICENCIO - ARAUCA, Sector 3.1
Villavicencio – El Yopal, no vemos tales beneficios, antes bien, nos sentimos
atropellados y mal utilizados, por la forma como han venido efectuando las
tales socializaciones, sin tener en cuenta las expresiones de una comunidad que
sólo desea que una obra con tal proyección, por ser un eje vial internacional,
se realice de la mejor manera y en las mejores condiciones posibles.
Según oficio de la ANI radicado
con el No 2016-306-004825-1, el gerente de proyectos nos manifiesta que “el concesionario
cuenta con 210 días para la entrega de los diseños”, llevamos 245 (para ese
día) y 516 hoy, y solo presentación de pre diseños, el mismo tiempo que,
pobladores cercanos a la vía, no han podido definir sus proyectos económicos.
No entendemos cómo no se conozca
aún un empalme entre las dos APP que pregonan sucederse en la misma ruta. Nos
causa una mala impresión el saber que EUROESTUDIOS, a quienes no conocimos, les
presentó el Proyecto Fase II, y la ANI sin conocimiento del terreno, lo
presentó a los proponentes para que sobre el mismo trayecto y sin contar con
otra u otras alternativas, realizaran unos planos que carecen de objetividad
futurista.
No entendemos cómo el gobierno
saca pecho en televisión, radio y publicaciones, proclamando un mejoramiento
colectivo y con un alto costo de inversión, todos EN MARCHA, si el pago de la
deuda nos corresponde es a los llaneros durante los próximos 30 años. No
entendemos cómo habla de mejoramiento social, si ni siquiera fueron capaces de
ofrecer una ciclo – ruta en un tramo que está tangiblemente demostrado que es
un corredor de recreación y de deporte, como es el que une a Villavicencio con
Restrepo.
No entendemos cómo en el documento
fase II lo especifican y para la fase III no lo tienen en cuenta, como es el
caso de obra para la intersección con la vía a El Cairo; así se manifiesta: “en
donde se presenten intersecciones importantes o se prevean conflictos de
tránsito que puedan inducir riesgo de accidentalidad, tales situaciones deberán
modelarse con el objeto de identificar conceptualmente el tipo de intersección
a utilizar”. Vale la pena mencionar que hasta hace tres años este sector
contaba con 43 fincas y ahora son tres colegios, ocho condominios con más de
270 casas construidas y 80 más por construir y 37 fincas.
No entendemos cómo con planos a
mano alzada, proponen realizar una segunda calzada interviniendo el piedemonte
en un sector donde la biodiversidad y los recursos hídricos son los que imperan,
y sin tener en cuenta la fragilidad con que se comporta el terreno deleznable
de esta cordillera, ni que el sector llano es el que es preponderante.
No entendemos cómo se pretende
cometer un arboricidio de más de 12.000 especies que sostienen la pata del
piedemonte y es el hogar de una gran cantidad de flora y fauna, con unos datos
inciertos, como los que demuestra el Estudio de Impacto Ambiental, el mismo que
no se pudo terminar de ser socializado el pasado 27 de marzo.
Sobre estos dos últimos puntos, en
la parte siguiente de esta ponencia, dejaremos constancia de lo sucedido y
aceptado. Continúo con los planteamientos hechos.
No entendemos cómo en la mayor
parte de las carreteras de Colombia, se han realizado variantes para evitar el
paso vehicular por las calles de los municipios, y ni en Restrepo ni en
Villanueva se tuvo en cuenta su progreso, su constante crecimiento y desarrollo,
para que sin sentido de razón alguna se incremente la división y por lo tanto
los riesgos y peligros para su población urbana. Para este punto insistimos en
que deben revisarse las cifras de tránsito promedio diario pues Euroestudios
previó para Restrepo 2.476 vehículos para el 2015, en este momento más de 2.600
son los que circulan modificando lo previsto para el 2025 de 3.984, ya que
según cálculos, estos se estarán cumpliendo en el 2020.
Creemos que el gobierno viene
conjugando mal el verbo SOCIALIZAR, creyendo que se reúne a una parte de la
comunidad, se les ofrece un pan y un jugo, para imponerle sus decisiones sin
considerar que la comunidad es la que conoce la realidad de sus zonas y que es
la que tiene plena potestad para orientar, proponer y ayudar a tomar
decisiones.
No pueden seguir considerando las
instituciones del Estado, el sentirse dueñas de una finca que se llama Meta y
que sus municipios son los potreros para que como “propietarios”, decidan dar
órdenes sin considerar que los que aquí vivimos no somos semovientes.
Hasta el momento y con lo que
superficialmente apenas conocemos en un trazado de 262 kms., en los cuales solo
46 contarán con una segunda calzada, no entendemos cómo se consignan tantos y tan graves errores.
Cómo pueden vender la idea de un mejoramiento en tiempo,
si la distancia entre Villavicencio y El Yopal no se acorta sino que se alarga
en 5.3 kms.; ni siquiera se propusieron a considerar reducir el trecho entre
Villanueva y Monterrey siendo que la geometría enseña que “recta es la menor
distancia entre dos puntos” y cómo la de mejorar costos si para los usuarios
que somos nosotros, se tienen previstos dos peajes adicionales a los tres
existentes.
Por favor, no nos crean tan
semovientes, que una vía que le permitirá al país un ejemplar desplazamiento
entre Venezuela y los otros países del sur del continente, no tenga en cuenta
los adelantos técnicos del pleno siglo XXI.
Debo aclarar y poner de manifiesto,
que en ningún momento nos oponemos a la construcción de la vía, nos oponemos es
a la desconsideración con que se miden los impactos ambientales y sociales
desde los pre diseños hasta ahora establecidos.
Muy seguramente los alcaldes de
cada uno de los municipios a intervenir, también tendrán sus razones para
opinar diferente, siempre y cuando solo se basen en lograr el bienestar
comunitario como fruto de su obligación constitucional y como miembros activos
de cada comunidad.
Sabemos que las decisiones, todas
las veces favorecen a unos y desfavorecen a otros, que no es el fin lograr una
complacencia total pero sí debe ser y es la intención, que tenemos que ser
tenidos en cuenta para que se pueda efectuar por sus condiciones propias de
paisaje y terreno, la mejor y más bella carretera de Colombia.
Para finalizar, cuentas y respuestas
claras, el proyecto anuncia la contratación de 9.000 empleos, qué bueno conocer
la nómina de los llaneros hasta ahora contratados en la parte administrativa y
operacional. Además, cuánto es al fin el valor con lo que quedamos endeudados
si en el Sistema de Contratación Pública aparece que la cuantía definitiva del
contrato es de $ 2”939.320’796.324 y Covioriente manifiesta que es $ 1”294.380´424.009.
Si es la primera cifra, creemos
que es sumamente costosa porque las obras a realizar no contienen, según
parece, ni túneles ni grandes viaductos.
Los invitamos señores de la ANI a
que sin arrogancia, a que con la humildad de profesionales serios, a que con la
transparencia de servidores públicos honestos, tengan en cuenta las
consideraciones que acá se presentan para que al menos, por este lado, podamos
vislumbrar una tranquilidad y una paz de afecto con las instituciones, como la
que se quiere seguir pregonando para orgullo y beneficio de todo un país. Hasta
aquí, lo manifestado en esa ocasión.
A raíz de la queja expuesta en
este auditorio por el ciudadano Jaime Fernández y como vecino de este municipio
llanero, el pasado 25 de enero, en la reunión de preparación para esta
audiencia, y de la publicación aparecida ese mismo día en el periódico Llano 7
días, quiero dejar la siguiente constancia:
El
22 de abril de 2016, con el oficio VDC-012-2016, recurriendo al derecho de
petición, esta Veeduría le presentó al director general de la ANLA en cinco
folios, los diferentes impactos identificados por las comunidades sobre el
Estudio de Impacto Ambiental expuesto por la Concesionaria sobre la Unidad 1
del contrato 010 de 2015, oficio que se acompañó con copias al director de la
ANI, a Covioriente, a la Interventoría 4G-2, a la gobernadora del Meta, a los
alcaldes de Villavicencio, Restrepo y Cumaral, al Concejo de Restrepo, a la
Contraloría General de la República, a la Procuraduría General de la Nación y a
los medios de comunicación local y nacional.
El
13 de mayo/16, recibimos respuesta al anterior oficio, en el que se nos
comunica que “hasta el momento no ha sido solicitada ante esta Autoridad la
evaluación de Licencia Ambiental para el proyecto en comento.”
El
16 de agosto de 2016, el alcalde de Restrepo y su secretario de Planeación, con
el oficio 100-31-01, dirigido a la doctora Claudia Victoria González, directora
encargada de la ANLA, le solicitaron que “antes de la expedición de la Licencia
Ambiental, se realice una Audiencia Pública en la última semana de ese mes o en
las primeras de septiembre, conforme a lo establecido en el art. 72 de la Ley
99 de 1993.”
El
mencionado oficio contiene además, preguntas e inquietudes sobre : A)
Afectación Ambiental. B) Replanteamiento de segunda calzada. C) Solicitud sobre
variante de Restrepo. D) Ciclo - ruta Villavicencio - Cumaral. E) Pavimentación
de vías terciarias y F) Construcción de andenes.
El
3 de octubre de 2016, en la sala de juntas de la Gobernación, en atención a una
solicitud que le hicimos a la gobernadora, se efectuó una reunión en la que
participamos: la gobernadora, el alcalde de Restrepo y el de Villavicencio, el
gerente de la Agencia de Infraestructura del Meta - AIM, la Concesionaria y
nosotros, y después de un largo y detallado análisis de la situación, se
convino que en 15 días se daría respuesta a las inquietudes sobre Impacto
Ambiental e Infraestructura de la Unidad 1.
El
10 de noviembre nos volvimos a reunir en compañía del delegado de la
gobernadora, del alcalde de Restrepo, del delegado del alcalde de Villavicencio
y de los representantes de la Concesionaria.
En
esta reunión se nos informó verbalmente por parte de la Concesionaria, que la
ANLA el 1 de noviembre había expedido el auto N° 05366, ordenando la
celebración de una Audiencia Pública Ambiental.
Acto
seguido, presentaron el estudio y análisis realizado sobre el inventario físico
de bienes y servicios en las márgenes izquierda y derecha de la vía (Km. 7 – Km.
13) y expusieron las condiciones de obras para responder a las diferentes afectaciones
que aparecen en el EIA y que fueron formuladas en el punto anterior.
Finalmente,
se concertó que basados en las explicaciones sobre las especificaciones y
razones técnicas planteadas en el informe presentado por Covioriente, el
alcalde de Restrepo desistiría de la petición formulada a la ANLA.
El
16 de noviembre de 2016, mediante el oficio 100-31-01, dirigido a la directora
encargada de la ANLA, el doctor César Augusto Robayo Álvarez, “se permite
informarle que se desiste de dicha diligencia en razón a que el tema
fundamental a tratar ya fue solucionado y acordado en mesa de concertación.”
El
23 de noviembre de 2016, con el oficio VDC-034-2016, dirigido a la doctora
Claudia Victoria González, la Veeduría le manifiesta que enterados de que la
Autoridad requería de información adicional, nosotros “como representantes de
la comunidad directamente afectada, le solicitábamos que se dignara ordenar la
derogación del mencionado auto para que se continúen con normalidad los pasos
siguientes para la aprobación final de las obras contempladas en el diseño
presentado por Covioriente en cumplimiento al contrato 010 de 2015.”
El
15 de diciembre de 2016, recibimos de la ANLA el oficio 2.2. 2016082770-2-000,
como contestación a nuestra solicitud, en la que la Subdirectora Administrativa
y Financiera encargada de las funciones de Jefe Oficina Asesora Jurídica, nos
manifiesta que “esta Autoridad, dará continuidad al trámite de la celebración
del mecanismo de participación ciudadana, ordenado mediante auto 5366 del 1 de
noviembre de 2016, a desarrollarse dentro de la evaluación de la Licencia
Ambiental aludida ya que se encuentra en evaluación de otra solicitud en el
mismo sentido, radicada por diferentes interesados, la cual, de ser procedente
se tramitará conjuntamente dentro de la audiencia ordenada.”
Y
aquí estamos poniéndole el pecho y la frente a la situación.
Amigos
todos, paisanos, hijos adoptivos del Llano, señores de la Concesionaria,
aprovechemos esta ocasión para que las obras que se van a efectuar sean un
modelo de profesionalismo y pulcritud para Colombia, sean para romper el
celofán del paquidermismo en infraestructura que nos ha correspondido a través
de los años, sean para que ambiente, infraestructura y deseos de cumplir el
objetivo, hagan que esta obra sea la mejor y la más bella de la patria.
Gracias.
NÉSTOR
RESTREPO ROLDÁN
Los otros textos publicados, se encuentran en los siguientes enlaces de esta misma página:
http://jaimefernandezmolano.blogspot.com.co/2017/02/doris-gallego-tanto-de-amor-como-de.html
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